Luego fue el propio director Peter Jackson quien, durante la convención, declaró que lo estaba considerando, aunque Warner Bros. siempre ha negado que haya planes oficiales para la transformación.
Las últimas noticias son que Warner, Jackson, Fran Walsh y Philippa Boyens se han reunido para discutir los posibles problemas y necesidades de realizar una tercera película. Actualmente el estudio parece estar de acuerdo con la trilogía, siempre y cuando los problemas financieros y legales se puedan solucionar fácilmente. Una fuente ha declarado a Heat Vision que: "Si vamos a hacerlo, tenemos que tomar la decisión ya. Los cineastas desean fervientemente contar más de la historia".
Se necesitaría una reescritura del guión y un replanteo de la historia, pero al parecer esta ya incluye partes de los numerosos apéndices de Tolkien que hacían que la historia estuviera demasiado comprimida en solo dos películas.
Por otra parte, ya estaba previsto que el equipo regresara a Nueva Zelanda para rodar tomas adicionales, por lo que el rodaje de nuevas escenas no plantearía ningún problema y no supondría un gran costo adicional para el estudio, que además tendría la ventaja de poder estrenar un probable blockbuster adicional.
El problema más obvio sería el reparto, que tiene un contrato por dos películas, no tres.
El plan original era estrenar El Hobbit: Un Viaje Inesperado el 14 de Diciembre de 2012 y El Hobbit: Partida y Regreso, el 13 de Diciembre de 2013. ¿Tendremos una tercera entrega en las navidades de 2014?